El Air Force One aterrizó en la capital española a las 23.00 (hora española) y Obama fue recibido en la pista por el rey Felipe VI y la vicepresidenta Soraya Saénz de Santamaría, entre otras autoridades.
Obama modificó su agenda para poder volver a Estados Unidos mañana, por lo que no visitará la ciudad de Sevilla y sus reuniones con el monarca, Felipe VI, con el jefe del Ejecutivo en funciones, Mariano Rajoy, y su visita a la base militar de Rota, serán más cortas.
A pesar del peso estratégico de España en la política de seguridad estadounidense, la última visita de un presidente de EEUU a suelo español se produjo hace 15 años, cuando George W. Bush mantuvo un encuentro con José María Aznar en 2001.
El hecho de que la de Obama sea una Administración saliente y el Ejecutivo de Rajoy esté en funciones, resta trascendencia a este viaje, dado que ninguna de las dos partes pueden asumir compromisos a largo plazo.