En el vestido, elaborado para la ocasión por la renombrada diseñadora de Emiratos Árabes, Mona Al Mansouri, Vladímir Putin aparece en un kimono como símbolo de fuerza y rodeado de ángeles y rosas.
Según Mansouri, el vestido lleva un claro mensaje político y humanista a la sociedad rusa: "Nosotros los árabes estamos de su lado".
La exquisita prenda no solo atrajo el interés de los participantes del foro sino de las redes sociales.
El propósito del foro de cultura árabe, organizado por la embajada del Líbano en Moscú, fue establecer un puente entre el Este y Oeste y fortalecer el diálogo entre las civilizaciones. Aparte de los diplomáticos, asistió al evento la princesa de Bahréin, Meriam Al Khalifa.