Donaciones a la Fundación Clinton: el 'peaje' para reunirse con Hillary

Los objetivos oficiales de la Fundación Clinton, creada en 1997, son la financiación de la salud, actuar en casos de desastre, cuestiones relacionadas con el crecimiento económico y el cambio climático. Sin embargo, la correspondencia de Huma Abedin, que trabajó como asistente de Clinton cuando esta era secretaria de Estado entre 2009 y 2013, reveló las verdaderas actividades de la organización.

Pagar por una reunión

Para concertar una cita con Clinton mientras ocupaba su puesto en el Departamento de Estado, los políticos, empresarios y otras figuras públicas se vieron obligados a realizar una donación a su fundación. Además, Abedin y Doug Band, funcionario de la Fundación Clinton, eran las personas a los que los donantes tenían que dirigirse para solicitar reuniones con la entonces secretaria de Estado.

Según los documentos publicados bajo la Ley de Libertad de la Información —Freedom of Information Act, por sus siglas en inglés—, en 2009, el actual rey de Arabia Saudí, Salmán bin Abdulaziz, intentó organizar una reunión con Clinton a través de Doug Band. En primer lugar, la política le negó el encuentro, pero tras recibir una donación de 100.000 dólares, cambió de opinión.

A juicio del experto en relaciones internacionales Yuri Pochta "otros políticos estadounidenses se comportan de la misma manera, lo que evidencia el hecho de que los organismos gubernamentales en EEUU son corruptos".

Pagar por los servicios prestados

Además, los correos muestran cómo Maureen White, especialista en asuntos humanitarios internacionales y recaudación de fondos para el Partido Demócrata, donó 75.000 dólares a la fundación de la candidata presidencial. También existe información sobre cómo el dirigente de un club deportivo solicitaba el apoyo de Clinton para que un futbolista británico no identificado, con antecedentes penales, pudiera obtener un visado para viajar a EEUU. En la correspondencia filtrada, también figura el líder de la banda de rock U2, Bono, quien solicitó a la secretaria de Estado que emitiera en directo sus conciertos a la Estación Espacial Internacional.

Según el presidente de Judicial Watch, Tom Fitton, "Hillary Clinton abusó de su cargo, por lo que es necesario que se inicie una investigación independiente para determinar si Clinton y sus colaboradores habrían violado la ley".

"En su mayoría, los estadounidenses no entienden de política, por lo que van a creer en lo que digan los demócratas, los cuales, por supuesto, tratarán de justificarse a sí mismos", ha comentado Pochta, además de añadir que "los materiales divulgados no harán daño a la campaña de Clinton y hasta podrían hacerla más popular".

Lucha contra los oponentes políticos

Con anterioridad, los líderes del Partido Demócrata también se vieron salpicados por un escándalo relacionado con la manipulación de los principales medios de EEUU, después de que el portal WikiLeaks hiciera públicos una serie de correos y documentos del Comité Nacional Demócrata (CND).

Según la información filtrada, durante las primarias, el CND intentó desacreditar a Bernie Sanders —candidato presidencial independiente y senador de Vermont— a través de la manipulación de la opinión pública y la organización de sabotajes dentro de la sede de Sanders. El mecanismo principal fue la 'infiltración' de partidarios de Clinton en la campaña de Sanders y la transmisión de la información recopilada a los jefes del partido.

Hillary Clinton ha afirmado en más de una ocasión que las 55.000 páginas de documentos que entregó al Departamento de Estado contienen todos sus correos relacionados con su servicio como secretaria de Estado. Sin embargo, los nuevos documentos revelados contradicen estas declaraciones hechas a lo largo de la campaña, según las cuales "todos los correos relacionados con el trabajo" fueron entregados a las autoridades.