"Nos reunimos con referentes de Barrios de Pie, la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP) y la CCC (Corriente Clasista y Combativa)", confirmó uno de los tres secretarios generales que conforman la CGT, Juan Carlos Schmid, en las redes sociales.
En este encuentro inédito, que se celebró en Buenos Aires y se extendió por más de dos horas, el triunvirato que dirige la CGT y las organizaciones sociales decidieron elaborar una agenda común de reclamos.
"Hay una estrategia común para universalizar la agenda, no importa que sean trabajadores formales o no", reivindicó durante una rueda de prensa posterior Héctor Daer, otro dirigente de la central obrera.
Uno de los principales desafíos que afrontan las entidades sociales y sindicales es la negativa del presidente Mauricio Macri a reabrir las negociaciones salariales entre empresas y sindicatos en las que interviene el Gobierno, conocidas como paritarias.
"Habrá empresas que no están en condiciones, pero por qué van a impedir que los que pueden equilibrar el salario lo hagan, eso sería autoritario", lanzó el tercer integrante de la cúpula que dirige la CGT, Carlos Acuña.
Este dirigente, proveniente del sindicato de estaciones de combustible, advirtió hace un día que se plantearán la adopción de medidas de fuerzas si el Gobierno insiste en cerrar la posibilidad de un aumento salarial.
Más preocupaciones
La central obrera también está preocupada por la "caída del empleo y el poder adquisitivo" y por el "aumento importante de la pobreza", afirmó Daer.
"Cada organización sindical va a sostener el poder de compra del salario más allá de las decisiones que pretenda el Poder Ejecutivo", advirtió el gremialista, procedente del sindicato de sanidad.
El referente reclamó además "una corrección en la política de comercio exterior porque lo que estamos consumiendo es elaborado en otras latitudes".
Ante este escenario, las organizaciones sociales coincidieron con la central obrera en declarar "la emergencia social" y en que el Gobierno convoque a un "diálogo multisectorial", indicó tras la reunión Daniel Menéndez, coordinador nacional de Barrios de Pie, un movimiento que surgió tras la crisis de 2001 y que cuenta con 40.000 afiliados.
La nueva conducción de la CGT, cuyas tres ramas confluyeron en un triunvirato el pasado 23 de agosto, coquetea desde hace unos días con la convocatoria de una huelga general contra el Ejecutivo.
La posibilidad de concretar el paro general se decidirá en el Congreso Federal que celebrará la CGT el próximo 23 de septiembre.
