El experto de política exterior y defensa estadounidense, Ted Galen Carpenter, llama la atención sobre la contradicción que presenta una situación en la que las Fuerzas Armadas estadounidenses llevan a cabo sus operaciones militares a una gran distancia de su propio territorio, pero fuertemente critican a aquellos países que contrarrestan esas actividades.
"Es un problema con el que nos enfrentamos muy a menudo: la idea de que todas las acciones de EEUU en el escenario internacional no solo son aceptables sino no deben someterse a preguntas y críticas", enfatiza Carpenter.
En particular, según el autor, Washington y los medios siguen condenando a Rusia por su intervención militar en el conflicto sirio mientras que su propia participación se califica de algo normal e incluso inevitable.
"La acción militar de Moscú en Siria —un aliado antiguo y un país a tan solo mil kilómetros de la frontera— se considera ilegítima mientras que la intervención de EEUU en un territorio a seis mil millas de distancia no es solo 'adecuada' sino también 'ineludible', tanto por razones estratégicas como morales", destaca el experto.
No obstante, las autoridades estadounidenses no quieren aceptar el hecho de que el Kremlin disponga de todas las razones para considerar que la presencia de EEUU en un territorio tan cercano a sus fronteras puede representar una seria amenaza para la seguridad nacional del país eslavo.
De esta manera, detalla el autor, la convicción jactanciosa de su propia virtud es "a la vez miope y peligrosa para el país norteamericano —desde el punto de vista de otros países, son las acciones de Washington las que pueden parecer profundamente amenazantes—".
"A pesar de los riesgos, algunos de estos países no van a rendirse ante el poderío de Washington", concluye Carpenter.