“Los jefes de departamentos diplomáticos continuaron su examen de la situación en Siria, incluyendo el potencial para la normalización de la situación en torno a Alepo, donde los grupos armados ilegales continúan los combates, a pesar de los acuerdos ruso-estadounidenses del alto el fuego entre los bandos del conflicto”, según el comunicado.
El Ministerio sigue que algunas unidades de la oposición moderada se niegan a separarse del grupo terrorista el Frente Fatah al Sham (el antiguo Al Nusra), proscrito en varios países, incluida Rusia.
Lavrov hizo hincapié en “lo inaceptable que son los intentos de los opositores supervisadas por Occidente de tratar de manera indulgente al Frente Fatah al Sham” y su oposición a las negociaciones sirias sobre un arreglo político.
El Ejército de Siria abandonó el alto el fuego el día 19, alegando numerosas infracciones por parte de los insurgentes.
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Altos cargos de Moscú afirmaron en más de una ocasión que el Ejército sirio es la única parte que cumplió las condiciones del armisticio durante siete días desde que se estableció, y denunciaron que Washington no comenzó a realizar la separación de la oposición moderada de los grupos terroristas sobre el terreno, incumpliendo de esa forma lo pactado.
El conflicto armado en Siria provocó entre 300.000 y 400.000 muertos desde marzo de 2011, según altos cargos de la ONU.
