El profesor destacó que, actualmente, el Ejército del mar ruso alcanza un nuevo nivel de desarrollo y EEUU debe analizar su creciente potencial. Este tema ya preocupa a Washington tanto, que hace un mes fue creado en Newport, EEUU, un centro analítico encargado de estudiar la flota rusa.
"Pese a las dificultades que hemos observado durante los últimos decenios, la Armada de Rusia ha alcanzado tal nivel de adiestramiento del personal y potencial técnico que le permite competir con cualquier flota del mundo", admite Peterson.
"El hecho de que hayan aparecido los submarinos Yasen se considera por el ejército del mar de EEUU como un motivo de gran preocupación. Es un submarino muy potente y peligroso, no entendemos bien ¿qué objétivos tiene?", expresa su preocupación el experto estadounidense.
"Atraen mucha atención los misiles hipersónicos Tsirkón y los misiles de crucero Kalibr. Son armas potentes que reflejan avances técnicos impresionantes. Desde el punto de vista del desarrollo de los navíos yo destacaría las nuevas fragatas de la clase Almirante Gorshkov que tienen muchas posibilidades", continuó Peterson.
Los misiles de crucero Kalibr se utilizaron en la operación rusa en Siria y cabe destacar que fueron lanzados tanto desde los buques de superficie como de los submarinos.
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Los misiles Tsirkón son hipersónicos, es decir, son capaces de alcanzar una velocidad 5 veces mayor que la del sonido, lo que les hace inmunes a los sistemas de misiles antibalísticos.
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