Resaltó que "no hay ningunas pruebas de acusaciones tan serias".
"Se hacen declaraciones reiteradas durante varias semanas de que estamos implicados en una infiltración de la correspondencia privada de los estadounidenses, de los intentos de hackear los servidores y otros", explicó Riabkov, agregando que se trata de una "histeria antirrusa sin precedentes".
"Llegaron a afirmar que anteriormente Moscú usó tecnologías similares en Europa y Eurasia para influir a la opinión pública", agregó.
Riabkov por su parte acusó a EEUU de aprovecharse de la escalada emocional por los "hackers rusos" para su campaña electoral.
Riabkov reiteró que Moscú continúa con su propuesta de llevar a cabo consultas sobre la seguridad cibernética.
"Desde noviembre pasado propusimos en reiteradas ocasiones a la Administración de EEUU celebrar consultas bilaterales con participación de correspondientes especialistas sobre la lucha contra la ciberdelincuencia, pero seguimos sin respuesta", constató.