"Haremos todo lo posible para dejar sin efectos prácticos la sentencia", afirmó la alcaldesa, que pertenece a Barcelona En Comú, una plataforma municipalista vinculada a Podemos.
En el mismo sentido que Ada Colau se expresó Pablo Iglesias, secretario general de Podemos, que calificó como una "mala noticia" la decisión del Tribunal Consitucional ya que, a su modo de ver, las corridas de toros son "maltrato animal".
El líder de Esquerra Republicana en el Ayuntamiento de Barcelona, Alfred Bosch, se mostró más duro en sus declaraciones y afirmó que "si el TC no respeta a los animales, no tenemos más remedio que no respetar TC y sus decisiones".
"En la ciudad no se harán más corridas de toros, diga lo que diga el TC", manifestó Bosch.
Por su parte, el exalcalde de Barcelona y líder del grupo municipal de Convergència, Xavier Trias, declaró que "no se puede tolerar ningún paso atrás" en lo que respecta a la celebración de espectáculos que impliquen el sufrimiento de animales.
Sin embargo, miembros del Partido Socialista de Cataluña, una de las federaciones socialistas más críticas con la dirección nacional del partido, anunciaron este jueves buscarán las vías legales para "impedir" que la región vuelva a acoger corridas de toros.
La única formación política que ha celebrado abiertamente la decisión del TC fue el conservador Partido Popular, cuyo líder en Cataluña, Xavier García Albiol, se mostró "muy satisfecho" por esa "buena noticia" aunque admitió que a él no le gustan las corridas de toros.
En opinión de Albiol, el debate en torno a este espectáculo en Cataluña no tiene que ver "con el sentimiento animalista" sino con "la voluntad de los independentistas de eliminar de la escena catalana cualquier cosa que huela a España".
En el ámbito de la sociedad civil, casi medio centenar de asociaciones animalistas se pronunciaron este jueves en contra de la decisión del Tribunal Constitucional.
