El nombre proviene de la lengua guaraní y designa a las bolitas de harina de maíz y queso que dan cuerpo a este potaje.
Para prepararlo precisarás un kilogramo de pollo en trozos, dos cebollas, un pimiento morrón, un ramo de perejil, cilantro, tres tomates, dos hojas de laurel, comino y curry a gusto. Para la cocción precisarás cuatro litros de agua y una olla grande. Para las bolitas de maíz harán falta 250 gramos de harina de maíz y 100 gramos de queso fresco, preferiblemente queso Paraguay.
Para empezar, fríes en un sartén los trozos de pollo hasta sellarlos. Corta las verduras el morrón, la cebolla y ponlas a hervir en el agua. Agrega luego a esa preparación el perejil, el laurel, el cilantro y las especias. Sazona con sal al gusto. Deja cocinando la sopa a fuego lento hasta que el pollo esté pronto y se haya concentrado un poco el caldo.
A continuación haz las bolitas de harina de maíz. Ralla el queso y mézclalo con la harina. Agrégale un poco del caldo y amasa hasta obtener una pasta homogénea. Haz bolitas pequeñas de unos tres centímetros de diámetro.
Echa las bolitas al caldo con el pollo. Cuando floten, es porque está pronto. ¡Listo! Ya puedes compartir el plato guaraní con el resto de tus comensales.