Una multitudinaria marcha de la Independencia organizada por los nacionalistas y radicales polacos bajo el lema "Polonia Bastión de Europa" reunió a cientos de miles de personas, quienes salieron a las calles inspirados más bien por motivos políticos que por la conmemoración del hecho histórico.
Los manifestantes recorrieron las calles de Varsovia gritando "De la cuña a la tumba, Vilna es polaca, Lvov es polaco", demandando la anexión de estos territorios —la capital lituana y la ciudad en la parte occidental de Ucrania, respectivamente-. Los nacionalistas quemaron banderas ucranianas, lo que llevó a la indignación en Kiev.
Vasili Zvarich, el encargado de negocios interino de la misión ucraniana en Polonia, anunció que Kiev espera "una reacción urgente" por parte de Varsovia. Calificó el hecho de "acto bárbaro". La embajada de Ucrania entregará una nota de protesta a la cancillería polaca, según Zvarich.
Además, muchos nacionalistas polacos que participaron en la marcha protestaron contra la "invasión" de los refugiados, particularmente, los musulmanes. Entre los manifestantes se oyeron los eslóganes "Muerte a los enemigos de la patria" y "Para ser un polaco, ser católico es un privilegio y un honor".
The March of Independence
— Grzegorz Chyb (@GrzegorzChyb) 11 de noviembre de 2016
Warsaw, Poland, now: pic.twitter.com/30ILt5RkgD