"No nos gusta hablar de ello por muy prudentes motivos, porque es una cuestión de seguridad, pero dudo de que haya un miembro de esta Cámara que no haya sido amenazado en los últimos años", dijo en un debate en el parlamento de Westminster.
Prominente defensor de la ruptura con la Unión Europea (UE), el diputado conservador admitió haber recurrido por urgencia a la policía en tres ocasiones en los últimos meses.
Los incidentes agresivos y amenazantes también afectaron a su mujer y secretaria personal, Jeanette, y particularmente a uno de sus tres hijos.
"Las vilezas que recibimos en Twitter son increíbles y la peor sucedió hace unos meses con una imagen de mi hijo pequeño siendo ejecutado por ISIS", desveló en referencia a Daesh, el autoproclamado Estado Islámico proscrito en Rusia y otros países.
Un retrato del adolescente inglés se insertó sobre la imagen de una víctima de los radicales yihadistas y se puso se circulación en la red social, según la narración del diputado.
El drástico aumento —la cifra es cuatro veces superior al coste de todo el año anterior— se juzgó necesario desde el asesinato durante la misma campaña de la diputada anti-Brexit, Jo Cox.
El juicio contra el presunto asesino, Thomas Mair, se está celebrando estos días en Londres.
El costo de la seguridad personal de los diputados fue de 160.023 libras en el año fiscal (unos 185.000 euros) hasta abril de 2015, casi el doble que los 77.234 libras (90.000 euros) gastada en el ejercicio anterior, de acuerdo con los datos oficiales.