La investigación de Simpson está basada en el argumento del día del juicio final —una teoría probabilista que hace posible predecir el número de seres humanos que habitarán nuestro planeta en cualquier momento del futuro basándose en el número de las personas que viven en la actualidad—.
De esta manera, el científico calculó que el riesgo de que se produzca un verdadero apocalipsis durante cualquier año dado a lo largo del siglo XXI es del 0.2%, lo que implica que la probabilidad de que nuestra especie no pudiera sobrevivir este siglo equivale a un 13%.
No obstante, la conclusión de Simpson es mucho más optimista que unos estudios anteriores, sobre todo, el del astrónomo británico Martín Rees, quien en su obra 'Nuestra hora final: ¿será el siglo XXI el último de la humanidad?' sugiere que hay un 50% de la probabilidad de que la raza humana deje de existir para el año 2100.