El chofer recogió a las dos hermanas, de 70 años, en la tarde del 21 de noviembre, después de que su avión aterrizara en el aeropuerto parisino de Le Bourget, informan medios locales.
Los tres circulaban por la autovía A1 cuando dos desconocidos que iban por la misma vía obligaron al conductor a detener el lujoso Bentley cerca de una estación de servicio.
Después de esto, los atacantes echaron aerosol en el rostro de los pasajeros, forzaron la caja fuerte del coche y robaron todas las pertenencias de las ancianas, entre ellas joyas, ropa de marca y prendas fabricadas de cuero. En total, la suma de bienes sustraídos supera los cinco millones de euros —5,31 millones de dólares—.
La Policía local sigue investigando el caso para tratar de desenmascarar a los autores.