"Tomando en cuenta el incremento de 25 puntos base en el rango objetivo para la tasa de referencia de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed), la Junta de Gobierno (de Banxico) ha decidido aumentar el objetivo para la tasas de Interés interbancaria a un día en 50 puntos base, para ubicarla en 5,75%", indica en un comunicado el banco mexicano emisor de moneda.
Las presiones sobre el tipo de cambio frente al dólar llevaron a la Junta de Gobierno a tomar la decisión de subir la tasa para prevenir que la depreciación del peso sea trasladado a la inflación, una de las variables más vigiladas por autoridades monetarias y financieras para que se mantenga en el rango de 3% anual, con una variación de más o menos 1 punto porcentual.
La Fed de EEUU prevé elevar en 3 ocasiones la tasa de interés de referencial que el miércoles fue elevada un rango de 0,50 a 0,75%.
"El cambio esperado en las políticas fiscal y monetaria en Estados Unidos ha provocado una apreciación significativa de la cotización del dólar frente a prácticamente todas las divisas, incluso aquellas de países avanzados", dijo el Banco de México al argumentar el alza.
La caída del peso
La inflación general anual aumentó en noviembre, al ubicarse en 3,3% en México.
El 17 de noviembre pasado, la tasa de interés fue elevada a 5,25% para proteger a la moneda mexicana, una de las más utilizadas en los mercados de divisas, que acumulaba una depreciación de 25% en términos anuales y casi 17% en 2016, pero sobre todo por la depreciación sufrida de 11 por ciento desde el triunfo de Donald Trump a esa fecha.
"La cotización de la moneda nacional presentó una ligera apreciación, a la vez que las tasas de interés para todos los plazos han permanecido relativamente estables", no obstante, el tipo de cambio y las tasas de interés continúan ubicándose en niveles más elevados que los observados antes de la mencionada elección presidencial en EEUU, indica el esperado anuncio de política monetaria mexicana.
No obstante, el banco central mexicano considera que "la volatilidad en los mercados financieros nacionales mostró una marcada disminución, después del aumento registrado en los días inmediatos posteriores a la elección presidencial en Estados Unidos".
Banxico considera que "el balance de riesgos para el crecimiento siguió deteriorándose" para México.
La Organización la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE, con sede en París) recortó a finales de noviembre las proyecciones de crecimiento de México de 2,6 a 2,2% en 2016 y de 3,0 a 2,3% del Producto Interno Bruto en 2017.
Las autoridades financieras mexicanas deben por lo tanto, "fortalecer los fundamentos macroeconómicos del país, perseverando en los esfuerzos de consolidación fiscal y realizando ajustes en la postura de política monetaria al ritmo que sea oportuno", alertó el banco.
Finalmente, considera prioritario que el gobierno "siga impulsando la implementación adecuada de las reformas estructurales", emprendidas en 2013.