En la capital rusa las temperaturas han descendido hasta los –26°С y los meteorólogos pronostican en los próximos días un frio de hasta –33°С. Se indica que la noche del 8 de enero será la más fría de la semana, con un rango de temperatura de 13 grados por debajo de la norma climática.
Los servicios comunitarios han sido puestos en alerta ante posibles averías. El Ministerio de Emergencias recomienda a los ciudadanos de la zona europea del país permanecer al aire libre lo menos que puedan y vestirse lo más abrigado posible.
Mientras tanto, los rusos no pierden la oportunidad de lucirse en las redes sociales, haciendo frente al rudo frío.
A temperaturas tan bajas incluso la humedad del aire se cristaliza, dibujando en los vidrios de las ventanas increíbles ornamentos de hielo. Un hermoso regalo de la naturaleza invernal que los ciudadanos observan desde el calor de sus hogares.
