Varios japoneses murieron víctimas del experimento; en especial sufrieron los pescadores de la embarcación Daigo Fukuryu Maru, contaminados por la lluvia radiactiva producto de la bomba de hidrógeno norteamericana.
Los 23 tripulantes sufrieron de síndrome de irradiación y fueron internados en dos hospitales en Tokio. El 23 de septiembre de 1954 falleció Aikichi Kuboyama, el radioperador jefe de la embarcación.
"Rezo para ser la última víctima de una bomba atómica o de hidrógeno", fueron sus últimas palabras.
En recuerdo de este trágico día y sus víctimas, Japón celebra el 'Día de la Lucha por la Paz', también conocido como 'Día de Bikini'. El 31 de julio de 2010, la Unesco inscribió a este atolón como el primer Patrimonio de la Humanidad de las Islas Marshall.