En la escuela a todos nos enseñaron que en condiciones normales la materia muestra tres estados claramente definidos: el sólido, el líquido y el gaseoso. Todo elemento pasa de un estado a otro dependiendo de la temperatura o la presión a la que se somete.
Con el tiempo los científicos añadieron a esa lista el plasma —un estado poco común en la naturaleza, pero que los científicos aprendieron a controlar y producir artificialmente—.
En 1996, un grupo de investigadores entre los que se encontraba John Reppy reciben el Premio Nobel de Física por haber conseguido el estado superfluido. Este estado de agregación es caracterizado por la ausencia de total viscosidad de manera que, en un circuito cerrado, la materia fluye interminablemente sin fricción alguna.
En 2001, los físicos Eric A. Cornell, Wolfgang Ketterle y Carl E. Wieman fueron galardonados con el Premio Nobel por alcanzar el llamado condensado de Bose-Einstein. Se trata de un estado que adopta la materia al ser enfriada hasta casi alcanzar el cero absoluto —la temperatura más baja del universo que corresponde, aproximadamente, a —273,15°C—.
Ahora, un grupo de investigadores liderados por Tilman Esslinger, profesor de óptica cuántica del Instituto de Electrónica Cuántica de Zúrich, y Tobias Donner, científico principal del mismo instituto, han reportado haber conseguido un nuevo estado de la materia que increíblemente muestra propiedades tanto de superfluidez, como del condensado de Bose-Einstein: el supersólido.
Según revela la nota publicada en la revista científica Phys.org, para ello los científicos introdujeron una pequeña cantidad de gas de rubidio en una cámara de supervacío y la enfriaron a una temperatura de unas pocas milmillonésimas de grado por encima del cero absoluto. Más tarde, los investigadores colocaron la materia obtenida en un dispositivo con dos cámaras de resonancia óptica entrecruzadas.
Increíblemente, la combinación de estos métodos provocó que la sustancia se cristalizara, como el condensado de Bose-Einstein, pero conservando sus propiedades de superfluido. Es decir, los átomos comienzan a comportarse como si fueran sólidos y fluidos a la vez.
Lea más: Presentan revolucionario proyecto de computadora cuántica gigante (vídeo)
El estado de agregación supersólido fue predicho por los físicos rusos Alexander Andreev y Ilya Lifshitz en 1969, con la hipótesis de que el helio-4 podría mostrar propiedades sólidas y líquidas simultáneamente bajo ciertas condiciones. Pero durante años, los científicos asumieron que sería imposible crear tal estructura atómica. Hasta ahora.