Según el medio, el individuo sirio en cuestión, conocido bajo el supuesto nombre de Ahmad Alkhald, ayudó a fabricar los chalecos bomba para Najim Laachraoui, autor del ataque suicida del 22 de marzo de 2016 en el aeropuerto Zaventem de Bruselas.
La investigación reveló que el terrorista llegó a Europa con documentos falsos a través de Macedonia con la ayuda del sospechoso principal de los atentados en la capital francesa, Salah Abdeslam, que actualmente se encuentra en una cárcel de alta seguridad en Francia.
Se precisa también que contra Alkhald, que por última vez fue visto el 16 de noviembre al partir de Viena rumbo a Estambul, pesa una orden de captura internacional.
El 13 de noviembre de 2015 tres grupos terroristas coordinados cometieron una serie de atentados en París y su suburbio más cercano, Saint-Denis, que dejaron un saldo de 130 muertos y más de 350 heridos.
Cuatro meses después, el 22 de marzo de 2016, dos explosiones se produjeron en el aeropuerto de la capital belga, Bruselas, y otra más en una estación de metro, que causaron 32 muertos y más de 300 heridos.
La autoría de estos ataques fue reivindicada por el grupo terrorista Daesh (autodenominado Estado Islámico, proscrito en Rusia y otros países).