© Sputnik / Vladimir AstapkovichDaniella Djeylani, de 22 años, ha dedicado su vida al fútbol americano.

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Daniella Djeylani, de 22 años, ha dedicado su vida al fútbol americano.
© Sputnik / Vladimir AstapkovichEsta mujer juega para el equipo Moscow Sirens y es miembro de la selección rusa de fútbol americano.

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Esta mujer juega para el equipo Moscow Sirens y es miembro de la selección rusa de fútbol americano.
© Sputnik / Vladimir AstapkovichAdemás del fútbol, a Djeylani le encantan los deportes extremos como el snowboarding y el wakeboarding. También es una amante del atletismo.

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Además del fútbol, a Djeylani le encantan los deportes extremos como el snowboarding y el wakeboarding. También es una amante del atletismo.
© Sputnik / Vladimir AstapkovichEn su vida cotidiana, Djeylani trabaja en un banco.

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En su vida cotidiana, Djeylani trabaja en un banco.
© Sputnik / Ilya PitalevLa jinete Anastasia Zadiran admite que la equitación es percibida simplemente como un entretenimiento para las mujeres, algo que hacen por diversión. Sin embargo, este estereotipo solo es justo cuando se trata de jinetes aficionadas. En la equitación profesional, las mujeres deben hacer frente a un 'techo de cristal'.

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La jinete Anastasia Zadiran admite que la equitación es percibida simplemente como un entretenimiento para las mujeres, algo que hacen por diversión. Sin embargo, este estereotipo solo es justo cuando se trata de jinetes aficionadas. En la equitación profesional, las mujeres deben hacer frente a un 'techo de cristal'.
© Sputnik / Ilya Pitalev"Un verdadero jinete es percibido como un caballero, un guerrero. Así que, ¡fuera del camino, mujeres!", explica Zadiran. Así, las jinetes tienen que romper con muchas ideas tradicionales para poder tener éxito.

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"Un verdadero jinete es percibido como un caballero, un guerrero. Así que, ¡fuera del camino, mujeres!", explica Zadiran. Así, las jinetes tienen que romper con muchas ideas tradicionales para poder tener éxito.
© Sputnik / Ilya PitalevZadiran no solo intenta acabar con 'el techo de cristal' en Rusia, sino también en el extranjero. Sin embargo, reconoce que podría haber conseguido más si hubiera sido un hombre.

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Zadiran no solo intenta acabar con 'el techo de cristal' en Rusia, sino también en el extranjero. Sin embargo, reconoce que podría haber conseguido más si hubiera sido un hombre.
© Sputnik / Ilya Pitalev"Espero que la gente se dé pronto cuenta de que es normal para una mujer cabalgar sobre una silla de montar", concluyó Zadiran.

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"Espero que la gente se dé pronto cuenta de que es normal para una mujer cabalgar sobre una silla de montar", concluyó Zadiran.
© Sputnik / Iliya PitalevEn los viejos tiempos, a los herreros se les consideraba personas peligrosas y misteriosas, ya que trabajaban con el uso del fuego y de los metales fundidos. Todavía hoy se cree que esta profesión es realmente peligrosa, especialmente para una mujer.

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© Sputnik / Iliya Pitalev
En los viejos tiempos, a los herreros se les consideraba personas peligrosas y misteriosas, ya que trabajaban con el uso del fuego y de los metales fundidos. Todavía hoy se cree que esta profesión es realmente peligrosa, especialmente para una mujer.
© Sputnik / Iliya Pitalev"No planeaba convertirme en herrera, todo sucedió de forma inesperada", declaró a Sputnik Natalia Zabélina. Su vida dio un giro cuando conoció a Valeri Kóptev, un legendario herrero de la ciudad de Tula que llegó a ser su maestro.

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"No planeaba convertirme en herrera, todo sucedió de forma inesperada", declaró a Sputnik Natalia Zabélina. Su vida dio un giro cuando conoció a Valeri Kóptev, un legendario herrero de la ciudad de Tula que llegó a ser su maestro.
© Sputnik / Iliya PitalevEn los años 90, Zabélina se dedicó a la producción de armas de acero de Damasco, algo que ella considera una forma de arte.

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En los años 90, Zabélina se dedicó a la producción de armas de acero de Damasco, algo que ella considera una forma de arte.
© Sputnik / Iliya PitalevDesde hace 5 años trabaja con la diseñadora Olga Jabálova. Juntas, crean armas únicas y sofisticadas.

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Desde hace 5 años trabaja con la diseñadora Olga Jabálova. Juntas, crean armas únicas y sofisticadas.
© Sputnik / Alexey KudenkoA la camionera Evguenia Márkova siempre le han encantado los automóviles. Al sacarse el carné de conducir a los 23 años, decidió convertirse en camionera profesional.

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© Sputnik / Alexey Kudenko
A la camionera Evguenia Márkova siempre le han encantado los automóviles. Al sacarse el carné de conducir a los 23 años, decidió convertirse en camionera profesional.
© Sputnik / Alexey KudenkoA pesar del estereotipo de que la mayoría de camioneros no tiene educación universitaria, Márkova tiene dos títulos: uno de seguridad informática y otro de administración.
La mujer incluso trabajó en la mítica empresa rusa Kaspersky LAB, sin embargo, nunca abandonó su sueño de ser camionera, ya que "solo puedes ser feliz haciendo lo que te gusta".
La mujer incluso trabajó en la mítica empresa rusa Kaspersky LAB, sin embargo, nunca abandonó su sueño de ser camionera, ya que "solo puedes ser feliz haciendo lo que te gusta".

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© Sputnik / Alexey Kudenko
A pesar del estereotipo de que la mayoría de camioneros no tiene educación universitaria, Márkova tiene dos títulos: uno de seguridad informática y otro de administración.
La mujer incluso trabajó en la mítica empresa rusa Kaspersky LAB, sin embargo, nunca abandonó su sueño de ser camionera, ya que "solo puedes ser feliz haciendo lo que te gusta".
La mujer incluso trabajó en la mítica empresa rusa Kaspersky LAB, sin embargo, nunca abandonó su sueño de ser camionera, ya que "solo puedes ser feliz haciendo lo que te gusta".
© Sputnik / Alexey KudenkoAfortunadamente, Márkova encontró una oferta de trabajo de una empresa de transportes que buscaba mujeres conductoras.
Ahora, conduce un camión de 20 toneladas y recorre miles de kilómetros cada mes. Márkova tiene otras tres compañeras que son mujeres.
Ahora, conduce un camión de 20 toneladas y recorre miles de kilómetros cada mes. Márkova tiene otras tres compañeras que son mujeres.

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Afortunadamente, Márkova encontró una oferta de trabajo de una empresa de transportes que buscaba mujeres conductoras.
Ahora, conduce un camión de 20 toneladas y recorre miles de kilómetros cada mes. Márkova tiene otras tres compañeras que son mujeres.
Ahora, conduce un camión de 20 toneladas y recorre miles de kilómetros cada mes. Márkova tiene otras tres compañeras que son mujeres.
© Sputnik / Alexey KudenkoAhora, conduce un camión de 20 toneladas y recorre miles de kilómetros cada mes. Márkova tiene otras tres compañeras que son mujeres

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Ahora, conduce un camión de 20 toneladas y recorre miles de kilómetros cada mes. Márkova tiene otras tres compañeras que son mujeres
© Sputnik / Ramil SitdikovDe niña, Elena Sóbol solía jugar al voleibol, pero siempre le interesó el boxeo, además, su entrenador le enseñó también algunos movimientos de este deporte.

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© Sputnik / Ramil Sitdikov
De niña, Elena Sóbol solía jugar al voleibol, pero siempre le interesó el boxeo, además, su entrenador le enseñó también algunos movimientos de este deporte.
© Sputnik / Ramil SitdikovMás tarde, tuvo que suspender su carrera deportiva para formarse. Al graduarse de la Facultad de Periodismo de la Universidad Estatal de Moscú, trabajó en varias agencias de noticias rusas, entre ellas Rossiya Segodnya, donde estuvo en el portal deportivo R-Sport.

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© Sputnik / Ramil Sitdikov
Más tarde, tuvo que suspender su carrera deportiva para formarse. Al graduarse de la Facultad de Periodismo de la Universidad Estatal de Moscú, trabajó en varias agencias de noticias rusas, entre ellas Rossiya Segodnya, donde estuvo en el portal deportivo R-Sport.
© Sputnik / Ramil Sitdikov"A pesar de no tener el tiempo suficiente para entrenarme, entendí que era algo que realmente quería hacer. Hace dos años y medio entré en la Academia de Boxeo".

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© Sputnik / Ramil Sitdikov
"A pesar de no tener el tiempo suficiente para entrenarme, entendí que era algo que realmente quería hacer. Hace dos años y medio entré en la Academia de Boxeo".
© Sputnik / Ramil Sitdikov"Gracias al boxeo, he encontrado una nueva yo. Es un deporte individual y ayuda a tener carácter. Y no es solo un arte marcial, sino también una buena escuela de vida", afirma Sóbol.

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© Sputnik / Ramil Sitdikov
"Gracias al boxeo, he encontrado una nueva yo. Es un deporte individual y ayuda a tener carácter. Y no es solo un arte marcial, sino también una buena escuela de vida", afirma Sóbol.
© Sputnik / Iliya PitalevTras graduarse de la Facultad de Derecho de la Universidad Kíkot del Ministerio del Interior de Rusia, Ekaterina Proniákina quiso convertirse en inspectora estatal de pequeñas embarcaciones.
"Decidí probarlo por pura curiosidad. Los numerosos intentos por intentar hacerme cambiar de idea solo me hicieron estar más convencida de que quería superar las barreras y patrullar junto a mis compañeros masculinos", explicó la mujer.
"Decidí probarlo por pura curiosidad. Los numerosos intentos por intentar hacerme cambiar de idea solo me hicieron estar más convencida de que quería superar las barreras y patrullar junto a mis compañeros masculinos", explicó la mujer.

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© Sputnik / Iliya Pitalev
Tras graduarse de la Facultad de Derecho de la Universidad Kíkot del Ministerio del Interior de Rusia, Ekaterina Proniákina quiso convertirse en inspectora estatal de pequeñas embarcaciones.
"Decidí probarlo por pura curiosidad. Los numerosos intentos por intentar hacerme cambiar de idea solo me hicieron estar más convencida de que quería superar las barreras y patrullar junto a mis compañeros masculinos", explicó la mujer.
"Decidí probarlo por pura curiosidad. Los numerosos intentos por intentar hacerme cambiar de idea solo me hicieron estar más convencida de que quería superar las barreras y patrullar junto a mis compañeros masculinos", explicó la mujer.
© Sputnik / Iliya PitalevDurante su trabajo como inspectora, Proniákina controla los movimientos de los pequeños buques y garantiza la seguridad de las personas a bordo.

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Durante su trabajo como inspectora, Proniákina controla los movimientos de los pequeños buques y garantiza la seguridad de las personas a bordo.
© Sputnik / Iliya Pitalev"Hubo quien me dijo que nadie iba a tomarse en serio a una mujer inspectora. He demostrado que estaban equivocados", declara Ekaterina.

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"Hubo quien me dijo que nadie iba a tomarse en serio a una mujer inspectora. He demostrado que estaban equivocados", declara Ekaterina.
© Sputnik / Iliya Pitalev / Acceder al contenido multimedia"Ya estoy acostumbrada a que la gente se sorprenda al verme vestida con uniforme. Sin embargo, esto no afecta a mi desempeño profesional", subraya Proniákina, que agrega que siempre es amable y sonriente cuando está de guardia.

"Ya estoy acostumbrada a que la gente se sorprenda al verme vestida con uniforme. Sin embargo, esto no afecta a mi desempeño profesional", subraya Proniákina, que agrega que siempre es amable y sonriente cuando está de guardia.