"La solución para el conflicto sirio requiere de diálogo efectivo y pleno respeto al derecho internacional, en ese contexto renovamos el apoyo a las negociaciones conducidas en Ginebra bajo el auspicio de Naciones Unidas y con base a las resoluciones del Consejo de Seguridad", expresó en un comunicado oficial el ministerio de Relaciones Exteriores.
"El Gobierno brasileño manifiesta preocupación con la escalada del conflicto militar en Siria. Reitera su consternación con las noticias del uso de armas químicas en el conflicto sirio", expresa en la nota oficial.
El Gobierno de Michel Temer, del conservador Partido del Movimiento Democrático de Brasil (PMDB), pide que se aclaren los hechos lo antes posible, a pesar de que el supuesto ataque químico se produjo el martes y no hubo una reacción oficial hasta hoy.
El Gobierno brasileño "reafirma la importancia de que se lleven a cabo investigaciones amplias e imparciales sobre lo ocurrido en Idlib, que lleven a aclarar los hechos y al castigo de los responsables", añaden en referencia al uso de armas químicas.
Las fuerzas estadounidenses atacaron con misiles la base aérea de Shairat en la gobernación de Homs, una instalación crucial en la lucha contra el grupo terrorista Daesh (autodenominado Estado Islámico y proscrito en varios países, incluida Rusia) durante la madrugada de este viernes.
Según un comunicado publicado en la página web de la Cancillería rusa, EEUU bombardeó la base siria "aprovechando como pretexto el incidente químico en la provincia de Idlib".
"EEUU, que no se dignó investigar los hechos, hizo una demostración de fuerza contra un país que lucha contra el terrorismo internacional", resaltó el ministerio ruso.
Por su parte, el Gobierno de Siria negó ser responsable del ataque con armas químicas realizado en la ciudad de Jan Sheijun en la provincia de Idlib el pasado martes y responsabilizó del suceso a los grupos armados de la oposición.