"A diferencia de otros conflictos en el espacio postsoviético, el Consejo de Seguridad de la ONU aprobó cuatro resoluciones referentes al conflicto de Nagorno Karabaj, son resoluciones conocidas, todo el mundo lo sabe, las fuerzas de ocupación armenias deben ser retiradas inmediatamente e incondicinalmente de los territorios ocupados, este es el principio básico al margen del cual no puede debatirse ningún otro asunto", aseveró el mandatario.
Las resoluciones demandaban "un cese inmediato de las acciones militares, una retirada inmediata, total e incondicional de todas las fuerzas de ocupación del territorio de Azerbaiyán".
Según el presidente azerbaiyano, no hay cambios ni puede haberlos en las posiciones de su país en el proceso de diálogo.
"El principio de la integridad territorial no es tema de debate, Azerbaiyán debe restablecer su integridad territorial", destacó.
"Porque en determinados casos nos enfrentamos a dobles raseros, a veces se da más atención a otros conflictos en el espacio postsoviético o se usan expresiones más precisas respecto a la solución de dichos conflictos", aseveró.
El conflicto de Nagorno Karabaj que divide a Armenia y Azerbaiyán desde 1988 experimentó en abril de 2016 una escalada después de haber permanecido latente durante más de dos décadas.
Bakú perdió el control sobre Karabaj y siete distritos adyacentes entre 1992 y 1994.
Para impulsar una solución negociada del conflicto se instituyó en 1994 el llamado Grupo de Minsk, copresidido por EEUU, Rusia y Francia.
Azerbaiyán insiste en recuperar su integridad territorial, mientras que Armenia defiende los intereses de la autoproclamada República de Nagorno Karabaj, que no es parte de las negociaciones.
