"El gas ruso va a jugar un papel extremadamente importante en la decarbonización de Alemania [la reducción del uso de carbono en la producción de energía eléctrica] de cara al rechazo a la energía atómica. El gas ruso va a jugar un papel importante hasta que no ampliemos nuestra infraestructura", dijo Ramsauer durante el encuentro de los diputados alemanes con sus colegas rusos.
"Al implementar este proyecto nosotros podemos aumentar el volumen del gas ruso, suministrado a Alemania de forma directa, de 55 millones de metros cúbicos hasta 110 millones. Eso va a corresponder al volumen del gas que actualmente se consume en el país", destacó.
Ramsauer también comentó sobre el tercer paquete energético de la UE, según el cual una empresa no puede dedicarse a la extracción, el transporte y la venta del gas de forma simultánea.
De acuerdo con el parlamentario, la norma europea debería aplicarse solo respecto al sistema de distribución del gas dentro de la UE, mientras que el tramo del gasoducto que atravesará el fondo del mar Báltico no tendría que ser sometido a esta regla.
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"El proyecto tiene sus propios adversarios, conocemos sus motivos y razones, no importa quién sea la Comisión Europea, los países del Este de Europa e incluso EEUU. Todas sus razones tienen el carácter político y no económico", dijo Ramsauer al destacar que las facciones de Bundestag que apoyan al proyecto, creen que este sea realizado "conforme al horario".
El proyecto Nord Stream 2 prevé la construcción de dos tuberías con capacidad para transportar 55.000 millones de metros cúbicos anuales de gas. El proyecto uniría la costa rusa con Alemania a través del mar Báltico y supondría una ampliación del gasoducto existente Nord Stream.