"Trump quiso ser un líder, pero cualquier líder en EEUU, si lo quiere ser de veras, se traga posteriormente sus palabras, su orgullo, si lo tiene, y da un giro de 180 grados", dijo Asad en una entrevista con AFP.
Según Asad, el presidente estadounidense es "solo uno de los intérpretes en el teatro".
Durante su campaña electoral Trump declaró que si gana las presidenciales, Washington se centraría en la lucha contra el grupo terrorista Daesh (autodenominado Estado Islámico, prohibido en Rusia y otros países).
Entretanto, el 7 de abril la Casa Blanca tomó la decisión unilateral de lanzar 59 misiles de crucero Tomahawk desde buques de guerra emplazados en el Mediterráneo contra la base aérea de Shairat de las fuerzas gubernamentales sirias, en la provincia de Homs.
El ataque fue una represalia al uso de sustancias tóxicas en la ciudad de Jan Sheijun, provincia de Idlib, del que Washington culpa a Damasco.
Según EEUU, los aviones sirios habían salido el 4 de abril de la base de Shairat para bombardear Jan Sheijun.
Damasco niega toda implicación en la tragedia que, según la Organización Mundial de la Salud, causó 84 muertos y 545 intoxicados.
