La creación de las Fuerzas Navales del Lejano Oriente tiene su punto de partida en un decreto del Gobierno soviético que vio la luz en un momento convulso de la historia del país. Los años 30 del siglo XX resultaron una época peligrosa y turbulenta, dado que Japón comenzó a expandirse cerca de las fronteras de la Unión Soviética.
En la actualidad, la Flota repara sus naves antiguas, construye nuevos buques, participa en maniobras y fortalece su defensa costera. Aunque la Flota del Pacífico ruso tiene que solucionar numerosos problemas, la institución goza de numerosas ventajas contra cualquier posible enemigo en la región.
Numerosos expertos militares aseguran que la situación actual en el Pacífico representa una amenaza para la seguridad nacional de Rusia. EEUU se beneficia de las tensiones cerca de las fronteras rusas, incluso en la península de Corea, para llevar a cabo el reconocimiento de las capacidades de la Flota del Pacífico.
Esto solo tiene una meta: limitar o entorpecer las capacidades operativas de la agrupación fuera de las aguas territoriales de Rusia.
La tarea principal de la Flota del Pacífico es impedir que los submarinos enemigos entren en 'zonas de despliegue activo'.
La fuerza más potente de la Flota del Pacífico son sus submarinos estratégicos, que forman parte importante de la tríada nuclear rusa, indica a Sputnik el analista militar Víktor Murajovski.
Otras naves están también destinadas a las actividades en la zona marítima cercana. Por el momento, esta cantidad de buques resulta suficiente.
"La Flota del Pacífico no está diseñada para realizar misiones a larga distancia, así que, a diferencia de la Armada estadounidense, suele desempeñar un papel defensivo. La meta de la Flota del Pacífico es garantizar la seguridad de nuestras fronteras", expresó Murajovski.
Según el entrevistado, el mayor 'aliado' de la Flota en la región es la geografía: dos bases navales principales, Vladivostok y Petropavlovk-Kamchatski, están situadas bastante lejos una de la otra, y esto supone una ventaja.
De este modo, la aviación y la flota cubren ambos frentes en el mar de Ojotsk, que es de importancia estratégica. Entretanto, el control sobre las islas Kuriles permite que los buques y submarinos rusos salgan del mar de Ojotsk al océano Pacífico sin problemas.
La segunda ventaja importante de la Flota es su defensa costera. En la actualidad, en el Lejano Oriente ruso se están formando dos divisiones de estas tropas, concretamente en las Kuriles y en la península de Chukchi. En caso de conflicto armado, estas unidades atacarán al enemigo desde posiciones bien fortificadas en tierra.
Además, las Kuriles se han convertido recientemente en el lugar de construcción de nuevo aeródromos para la aviación militar.
La Flota del Pacífico sigue defendiendo la 'puerta trasera' de Rusia y viene mejorando sus capacidades. De ahí que el país pueda estar seguro de que esta agrupación será capaz de proteger el territorio de cualquier invasión enemiga.