"Hay que reaccionar de manera tranquila y firme y con prudencia: en el marco de nuestras obligaciones ante los socios más cercanas, al mismo tiempo partiendo de la situación real y no de guiones radicales modelados artificialmente", subrayó Makéi en su artículo en el periódico Bielaruskaya dumka.
A la vez reconoció que algunas "acciones que últimamente realiza la OTAN son inadmisible para Bielorrusia".
El canciller recordó que en 1995 Minsk se adhirió al programa Asociación para la Paz y sigue desarrollando la cooperación con la OTAN en los varios ámbitos.
En particular, Makéi mencionó la colaboración en las esferas de formación militar, control de armas, lucha contra el terrorismo internacional y el crimen organizado, no proliferación de armas de destrucción masiva, participación en las operaciones humanitarias, medicina y otras.
