Los países garantes de la tregua en Siria (Rusia, Irán y Turquía), tras firmar el memorando sobre las zonas de seguridad en este país árabe, crearán en cinco días un grupo de trabajo para cumplir con ese documento, dice el proyecto final del memorando proporcionado a Sputnik.
"Los garantes, durante los cinco días posteriores a la firma del memorando, crearán un grupo de trabajo a nivel de representantes autorizados para determinar las zonas de desarme, de tensión y las de seguridad, así como para resolver cuestiones técnicas relacionadas con el cumplimiento del memorando", dice el proyecto.
"El grupo de trabajo conjunto presentará informes sobre la resolución siria en las reuniones en el marco del proceso de Astaná", declara el documento.
Asimismo, las zonas de distensión en Siria estarán rodeadas de unas áreas de seguridad para evitar el fuego directo entre los bandos del conflicto, según se desprende del proyecto del memorando a disposición de Sputnik.
"A lo largo de las fronteras de las zonas de distensión se prevé crear unas áreas de seguridad para evitar incidentes a causa de enfrentamientos armados directos entre los bandos del conflicto", dice el proyecto acordado en las consultas en Astaná.
Según el documento, se prevé establecer cuatro zonas: en la provincia de Idlib, partes de las vecinas Latakia, Alepo y Hama, parte del norte de la provincia de Homs, Guta Oriental y en el sur del país en las provincias de Deraa y Al Quneitra.
El proyecto indica que en las zonas de distensión se supone establecer "un régimen de contención de las hostilidades entre los bandos del conflicto", que prohíbe el uso de todas las armas.
El documento subraya que todos los bandos del conflicto sirio, Damasco y los grupos de la oposición armada que se sumaron a la tregua, deberán cesar todas las hostilidades y no podrán recurrir a "arma alguna, incluidos los ataque aéreos".
También se espera crear en estos territorios "unas condiciones necesarias para prestar la asistencia médica a la población y atender sus necesidades comerciales, cívicas y otras".
"Adoptar las medidas necesarias para recuperar la infraestructura social, el abastecimiento de agua y otras instalaciones del sistema de soporte vital", estipula el proyecto.
Dentro de las zonas se instalarán "puestos de control para el paso libre de los civiles, suministros de ayuda humanitaria y las actividades comerciales", dice el proyecto al añadir que se construirán centros de monitoreo para vigilar el alto el fuego.
Se precisa que las misiones de vigilancia de la tregua se realizarán por los militares de las tropas gubernamentales y los grupos de oposición que se sumaron al proceso de reconciliación.
Según el documento, existe también la posibilidad de que en estas tareas participarán los militares de los países garantes.
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Los países garantes, añade el texto, están comprometidos a garantizar el cumplimiento del acuerdo por parte de los bandos del conflicto y adoptar las medidas necesarias para seguir luchando contra las organizaciones terroristas fuera de las zonas de distensión.
A la cita acuden las delegaciones del Gobierno sirio y de varios grupos de la oposición armada.
También participan las comitivas de Rusia, Irán y Turquía, el enviado de la ONU para Siria, Staffan de Mistura, el secretario de Estado adjunto de EEUU, Stuart Jones, y un alto funcionario del Ministerio jordano de Exteriores.
Las tres anteriores rondas celebradas en enero, febrero y marzo concluyeron con un acuerdo para crear un grupo de vigilancia del alto el fuego establecido el 30 de diciembre de 2016.
