México estuvo boca del mundo en los últimos meses por su polémica pero estrecha relación con Estados Unidos. La inversión, el comercio y su moneda fluctuaron en medio de una incertidumbre que persiste en la más potente economía de América Latina.
"Evidentemente que sí ha habido un comportamiento un tanto errático de la moneda (…) Es muy difícil poder hacer un pronóstico válido para su comportamiento porque muchas de las expectativas están generadas por factores tan subjetivos como una declaración o incluso un twit del presidente de los Estados Unidos. Eso nos ha afectado de forma importante", explicó el periodista y experto en finanzas mexicano Enrique Campos Suárez.
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