"En un futuro próximo se perfilarán avances positivos en la solución del problema nuclear de la península coreana, ya que el presidente de la República de Corea, así como el pueblo del país, se preocupan por la situación actual y el presidente considera que su tarea prioritaria es normalizar la situación en Corea", dijo Timonin en una entrevista con la cadena Rossiya 24.
"El Gobierno de la República de Corea anteriormente y ahora califica a Rusia como un actor poderoso que tiene mucha influencia en la península coreana, como un país que tiene relaciones amigables con Corea del Norte y puede influir en Pyongyang", agregó el diplomático ruso.
Según el embajador, el nuevo presidente de Corea del Sur, "a diferencia de las Administraciones anteriores", pretende solucionar este problema "mediante el desarrollo de las relaciones humanitarias, económicas y comerciales" sin presionar a Pyongyang.
El dirigente del Partido Democrático, Moon Jae-in, de 64 años, tomó posesión como nuevo presidente de Corea del Sur el 10 de mayo tras haber ganado en la víspera las elecciones anticipadas con más del 41% de los apoyos.
Corea del Norte realizó el 16 y el 29 de abril nuevos ensayos de misiles balísticos en violación de las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU; ambas pruebas resultaron fallidas.
Lea más: Pyongyang llama a Seúl a poner fin a la confrontación
En 2016, el régimen norcoreano llevó a cabo su cuarto y quinto ensayos nucleares y más de veinte pruebas de misiles balísticos.
A la escalada de tensión en torno a la península de Corea contribuye la presencia de un grupo de ataque naval estadounidense, incluyendo el portaaviones nuclear USS Carl Vinson.