"Regresé ayer (el miércoles) a mi prisión de Barbadillo después de gran susto por riesgo de infarto; mil gracias por solidaridad de amigos de todo el Perú", escribió Fujimori.
Regrese ayer a mi prisión de Barbadillo después de gran susto por riesgo de infarto. Mil gracias por solidaridad de amigos de todo el Perú.
— Alberto Fujimori (@albertofujimori) 18 de mayo de 2017
El exmandatario fue internado en cuidados intensivos por una taquicardia que sufrió en la madrugada del jueves 11 de mayo.
En Twitter el expresidente también criticó a la Dirección de Seguridad de Penales de la Policía Nacional del Perú (Dirsepen) por considerar que su atención fue demasiado lenta para la gravedad de su salud.
"Esta vez requería por gravedad evacuación inmediata, pero no me explico por qué Dirsepen no me llevó en unidad policial que estaba a la mano; a pesar de la demora pude llegar a Unidad de Cuidados Intensivos; no era mi hora todavía, pero retraso así podría generar un desenlace fatal", aseguró Fujimori.
Esta vez requería por gravedad,evacuación inmediata.Pero no me explico porque DIRSEPEN no me llevó en unidad policial
— Alberto Fujimori (@albertofujimori) 18 de mayo de 2017
que estaba a la mano
A pesar de la demora pude llegar a Unidad de Cuidados Intensivos.No era mi hora todavía,pero retraso así podría generar un desenlace fatal
— Alberto Fujimori (@albertofujimori) 18 de mayo de 2017
El exmandatario ya ha sido internado en otras ocasiones por problemas en el páncreas, en la espalda y por riesgo de isquemia cerebral.
Fujimori agregó que lo "mínimo" que pide es que "se garantice" su "elemental derecho a la vida y la salud".
El presidente peruano Pedro Pablo Kuczynski dijo en abril que su Gobierno estaba estudiando el caso, aunque aseguró que "no se va a dar ninguna ley que se aplique a una (sola) persona".
Fujimori cumple una condena de 25 años por los delitos de asesinato con alevosía, secuestro agravado y lesiones graves.
La justicia lo consideró autor intelectual de las matanzas de Barrios Altos, en 1991, y La Cantuta, en 1992, cometidas por un escuadrón del Ejército conocido como el grupo Colina, así como del secuestro de un empresario y de un periodista.