Según los últimos datos del centro, otras 111 personas están desaparecidas.
Más temprano, se informó de 146 muertos y 112 desaparecidos.
Las autoridades de Sri Lanka, donde las lluvias torrenciales continúan desde hace unos días, solicitaron ayuda a la ONU y los países de Asia del Sur.
La Federación Internacional de la Cruz Roja (FICR) estima que miles de personas sobre el terreno están gravemente afectadas por el cataclismo y ha proporcionado apoyo financiero, técnico y operacional a la Cruz Roja de Sri Lanka.
"Muchos lo han perdido todo. Ya hemos despachado nuestras reservas de socorro preparadas a las áreas afectadas, pero hay que hacer más en los próximos días. También tenemos que buscar la mejor forma de apoyar a estas personas a reconstruir sus vidas a largo plazo", cita la FICR a Gerhard Tauscher, jefe de Operaciones en Sri Lanka.
La ONG humanitaria Save the Children teme que las inundaciones agraven la crisis del dengue en Sri Lanka que en en lo que va de año registró 53.000 casos, casi un 150 por ciento más que en el mismo período de 2016.