"El profesionalismo y el coraje de la policía nacional de Afganistán se reflejó en los 13 oficiales que murieron en el lugar de la explosión; que descansen en paz estos héroes", dice un comunicado de la misión.
Una fuerte explosión se produjo este miércoles por la mañana en la capital afgana, cerca del palacio presidencial y varias embajadas extranjeras, provocando al menos 90 muertos y 380 heridos.
Además, fueron dañadas las sedes diplomáticas de Alemania, China, Egipto, Emiratos Árabes Unidos, Francia, Irán, Kazajistán, República Checa y Turquía, así como las oficinas de varios medios iraníes.
Según los datos preliminares del Ministerio del Interior afgano, la bomba fue colocada en un camión cisterna.
La televisión afgana 1TV reportó que el atentado fue reivindicado por el grupo terrorista Estado Islámico, o Daesh, prohibido en Rusia y otros países.