"Tres años después del asesinato de manifestantes y fuerzas del orden en el Maidán en Kiev y la violencia en Odesa, el ACNUDH sigue preocupado porque los esfuerzos para llevar a los instigadores ante la justicia no dieron resultados tangibles", dice el texto del informe.
La ONU denunció la falta de progreso en la investigación de la tragedia en Odesa, al señalar que "las acciones que se emprenden parecen selectivas y apuntan a un posible sesgo".
A finales de noviembre de 2013, los partidarios de la integración europea invadieron la Plaza de la Independencia de Kiev, Maidán, y protestaron por la decisión de suspender la firma del Acuerdo de Asociación entre Ucrania y la UE.
En las semanas posteriores, el Maidán se convirtió en el epicentro de confrontaciones entre los radicales y la policía, con un saldo de numerosas víctimas mortales por ambas partes.
Los nacionalistas incendiaron un campamento de manifestantes y luego prendieron fuego a la Casa de los Sindicatos, en la que quedaron atrapados activistas anti-Maidán.
Lea más: Consejo de Europa recuerda que dio recomendaciones para investigar muertes en Maidán
El conflicto se saldó con 48 muertos y más de 250 heridos (reconocidos oficialmente), aunque la oposición asegura que fueron muchos más.
Las audiencias relacionadas con esta tragedia empezaron en noviembre de 2014, pero con frecuencia se posponen bajo uno u otro pretexto.