La delegación constaba de 50 personas: representantes de los medios de comunicación de Bulgaria, Italia, Alemania, España, Cuba, Siria, Líbano, Islandia, Kuwait y Ucrania. El viaje fue organizado por el Ministerio de Exteriores ruso, informa Krimski most, el centro de comunicaciones del puente.
"Nunca he visto una operación a esta escala. Para mí es una experiencia sin precedentes. Puedo ver cómo trabaja la gente, el nivel de su preparación, sus conocimientos profundos. Para Rusia, mucho depende de este proyecto: la vida de las personas de Crimea, la vida de la propia Rusia, la imagen del país. Este es un gran paso político, no solo tecnológico", dijo el periodista italiano Giulietto Chiesa.
También destacó que se había quedado sorprendido por la velocidad de la construcción, ya que no hay tiempo para demoras dada la necesidad urgente de estrenar el puente.
"¡No tengo palabras! Hay una sensación de que el puente se quedará aquí durante no 100, sino 1.000 años. Voy a tratar de transmitir mis emociones a los lectores", dijo el corresponsal alemán Ulrich Heyden.
El puente de Crimea será el más largo de Rusia. Su longitud alcanzará los 19 kilómetros. La construcción se lleva a cabo durante todo el día en ocho sitios distintos simultáneamente. La parte para automóviles se pondrá en marcha en diciembre de 2018, mientras que el ferrocarril empezará a funcionar en diciembre del 2019.
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