"Pensé que Trump congelaría lo que se había hecho hasta ahora, que mantendría las primeras medidas anunciadas por Obama, pero lo que anunció son medidas directamente duras, lo que me parece coherente con su visión de la política externa general", explicó el analista político.
Trump anunció este 16 de junio en Miami que endurecerá su política hacia la isla porque el Gobierno cubano no realizó los avances prometidos en contrapartida a las medidas aperturistas de Obama.
Entre otras medidas volverá a limitar parcialmente los viajes de los estadounidenses a la isla y mantendrá las sanciones.
El embargo continuará, "algo que ya era de prever", como apunta Wrobel, que recuerda que este asunto es competencia del Congreso norteamericano.
El analista resalta en cualquier caso que Trump no dedicará mucho más tiempo a Cuba, puesto que en sus primeros meses de Gobierno demostró que su prioridad a nivel internacional está más enfocada a Asia y Oriente Próximo y no tanto a sus vecinos del sur.
"América Latina y el Caribe no son una prioridad para Trump; sus relaciones con México se deterioraron rápidamente, con Venezuela también y en el resto, incluyendo Brasil, no hay ninguna perspectiva", remarcó.
Trump ordenó este 16 de junio nuevas regulaciones para acabar con los viajes individuales a Cuba que permitan contactos con el pueblo de la isla, además anunció que la Oficina de Control de Bienes Extranjeros de Estados Unidos (OFAC, por sus siglas en inglés) espera implementar cambios en su política de sanciones hacia la isla en los próximos meses.