Aquí tiene las instrucciones para intentar sobrevivir en este entorno salvaje, recopiladas por RBTH:
— El miedo es su peor enemigo. Si se encuentra solo en la espesura del bosque, lo más importante es calmarse, ya que el miedo destruye la lógica, la objetividad y el razonamiento en poco tiempo, lo que lleva al caos mental y a las malas decisiones.
— Los ríos y los lagos son marcadores muy útiles. Incluso si no sabe de dónde fluye el agua, es mejor permanecer cerca de ellos. Cruzar ríos desconocidos presenta un riesgo enorme, puede haber flujos submarinos o una cascada.
Si encuentra una carretera o algún cable de electricidad, sígalo hasta llegar a un asentamiento humano. Después de la puesta del sol, cuando hay menos niebla y aumenta la presión del aire, puede escuchar el sonido de los trenes a decenas de kilómetros de distancia.
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— Los preparativos para la noche deben hacerse cuando hay luz del día. Reúna tanta leña como sea posible, si tiene la suerte de contar con fósforos o un encendedor. Si no, trate de iniciar un fuego de fricción, aunque solo le funcionará en condiciones secas y calientes.
— Las mejores épocas para encontrar comida en la taiga son el verano y el otoño. Se pueden encontrar frutos silvestres, hierbas y helechos en los bosques. También puede capturar pequeños animales con trampas de fabricación propia o probar la pesca de invierno. Y coma solamente lo que usted conoce.
Con el agua no hay problema en la taiga. Está llena de ríos, lagos, manantiales y arroyos. Las huellas de los animales le llevarán al agua.
— La taiga está llena de animales salvajes, pero solo cuatro de ellos representan una seria amenaza para los seres humanos: tigres, osos, lobos y jabalíes. Si ve cachorros, deje el área inmediatamente. La madre no dudará en atacarle para proteger a su descendencia.
Grite y agite tus manos si se encuentra un oso. Puede pensar que usted es más grande que él, y salir de la zona. Si le ataca, acuéstese en el suelo y finja estar muerto.
Nunca haga esto con los lobos. Considerarán este comportamiento como un acto de agresión. La mejor manera de mantenerse a salvo de lobos y jabalíes es trepar a un árbol. Esto no funcionará con los osos.
— Y la regla de oro en la interacción con los animales silvestres es la misma regla que debe aplicarse cuando se pierde en la taiga: intentar no entrar en pánico. Los animales fácilmente perciben el miedo y tienden a ser más agresivos cuando lo hacen.