"A partir del momento en que el Estado homologa la colaboración premiada atestando su validez ésta sólo podrá incumplirse si el colaborador no honra lo que fue obligado a hacer", dijo uno de los jueces del Supremo, Luis Roberto Barroso, quien defendió que se mantengan las actuales reglas de las delaciones premiadas.
Con las actuales reglas los acusados de cometer crímenes de corrupción obtienen destacados beneficios penales a cambio de aportar informaciones a la Justicia.
Los directivos de JBS (el mayor grupo productor de carne del país) que acusaron a Temer de corrupción, por ejemplo, también confesaron haber sobornado a más de 1.800 políticos, pero están en libertad gracias a este tipo de acuerdos con la Justicia.
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Al mantener el proceso de JBS en manos de Fachin los jueces del Supremo también decidieron que las futuras investigaciones contra Temer las lidere este magistrado.
