"Aparte de que se lanzaron solo seis misiles, todos apuntaron en el blanco con alta precisión", indicó.
El experto recordó que durante el tiempo de su servicio en la Armada de Rusia, los soldados se vieron obligados a disparar sobre objetivos ficticios estacionarios o móviles.
Sin embargo, los tiempos han cambiado y, según Úrchenko, los disparos que realizan los soldados rusos sobre las instalaciones terroristas en Siria son la "mejor forma de entrenamiento para los tripulantes de los buques de guerra".
Asimismo, afirmó que los lanzamientos de los Kalibr de la Armada rusa han demostrado en Siria un mejor rendimiento que los Tomahawk de EEUU en materia de la precisión.
Úrchenko también expresó su profunda convicción de que los terroristas pronto serán expulsados del territorio de este país árabe con la ayuda de la Armada de Rusia.