"El presidente Trump está preparado para imponer nuevas y duras consecuencias a Irán, a menos que todos los ciudadanos estadounidenses injustamente detenidos sean puestos en libertad y repatriados", dice el comunicado.
Wang es un ciudadano estadounidense de origen chino y estudiante del doctorado de historia en la Universidad de Princeton que fue detenido en Irán en agosto del año pasado, acusado de espionaje, y sentenciado este mes.
"Irán es responsable del cuidado y bienestar de cada ciudadano estadounidense que esté bajo su custodia", añade el comunicado de la Casa Blanca.
El texto reclama asimismo que sean liberados y repatriados Robert Levinson, detenido en Irán por más de 10 años, y Siamak y Baquer Namazi, arrestados en territorio iraní durante el Gobierno de Barack Obama (2009-2017), "junto con todos los demás ciudadanos estadounidenses detenidos de forma injusta por Irán".
Siamak Namazi y su padre, Baquer, tienen ciudadanía estadounidense e iraní y fueron condenados el año pasado por la justicia de Irán a 10 años de prisión por colaborar con un Gobierno extranjero.