"La mayor dificultad a la que nos enfrentamos es la falta de deseo de varios países de Occidente de luchar contra el terrorismo. Prefirieron invertir en este fenómeno que genera miedo y terror", manifestó Mikdad.
El político cree que todos los problemas de la región están entrelazados con el deseo de ciertos países occidentales de restaurar su dominio colonial.
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Makdid también comentó las acusaciones sobre el uso de armas químicas e indicó que el Gobierno del país árabe, en numerosas ocasiones, solicitó que las organizaciones competentes realizaran una exhaustiva investigación pero, según recalcó, Washington bloqueó estos intentos.
Según el entrevistado, el Gobierno sirio coopera con 23 organizaciones internacionales que coordinan su trabajo con los representantes oficiales de Damasco.
"Esta lista sería mucho mayor si todas las organizaciones sociales y humanitarias de verdad se ocuparan de apoyar a los civiles y no de ayudar a los terroristas, tal y como se lo ordenan sus patrocinadores de EEUU, el Reino Unido y Francia", dijo el viceministro.