"El Gobierno de Chile se opone a cualquier golpe militar de cualquier signo político que sea, a cualquier levantamiento de carácter bélico, a la violencia y a la represión", dijo Muñoz el lunes en una conferencia de prensa desde la Cancillería.
El 6 de agosto, un grupo de diez personas atacó la base militar de Paramacay, en la ciudad venezolana de Valencia (centro-norte), en el que dos de los implicados resultaron muertos y uno herido.
Muñoz, en tanto, explicó que Chile espera que exista una negociación política pacífica entre el Gobierno de Nicolás Maduro y la oposición, para encontrar una salida a la crisis que vive Venezuela.
El canciller sostuvo que ese país ya no es una democracia y dijo que, lamentablemente, está en camino a convertirse en una dictadura.
"La [Asamblea Nacional] Constituyente despidió a la fiscal nacional, ese fue su primer acto; el Gobierno ha ordenado la detención de abogados nombrados jueces por la Asamblea Nacional, es decir, por el Parlamento; la Asamblea Nacional sigue en desacato según el Tribunal Supremo, que está integrado por personas incondicionales al Gobierno; hay personas detenidas y pasadas a tribunales militares y hay agresiones a la Asamblea Nacional y a sus parlamentarios", enumeró Muñoz.
Asimismo, el canciller chileno criticó la información dada a conocer el 6 de agosto, de que la Asamblea Constituyente ya no se extenderá solo por seis meses, sino que durará dos años.
Muñoz se refirió además a la reunión que el 8 de agosto sostendrán en Lima un grupo de cancilleres de la región para debatir sobre la situación en el país caribeño.
"Estarán presentes más de una docena de países del hemisferio y trataremos de constituirnos en un mecanismo permanente que haga seguimiento de lo que ocurra en Venezuela; tomaremos algunas medidas y alguna declaración habrá", adelantó.
Además reveló que los cancilleres han estado intercambiando opiniones entre ellos estos últimos días.
"Personas importantes han solicitado la protección de Chile y se la hemos otorgado; no han solicitado asilo político, porque están explorando otras alternativas con sus respectivos abogados, pero si lo solicitan Chile se los otorgará de inmediato cumpliendo con su tradición histórica y nuestra política humanitaria", informó Muñoz.
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Consultado por la capacidad de la Embajada de recibir personas ante la posible llegada de más refugiados, el canciller contestó que actualmente no existe una situación de colapso, pero hizo hincapié en que es importante tener presente las condiciones logísticas del lugar por si llegan más personas.
"Es importante que otros países también se abran a recibir personas, como ya lo ha hecho Panamá y otros países; no los voy a nombrar a todos porque estos países han pedido discreción en el tema, pero que estén recibiendo gente en las embajadas es muy positivo, porque habla bien de la región", acotó.
El 31 de julio la ministra portavoz del Gobierno de Chile, Paula Narváez, confirmó que la Administración de la presidenta Michelle Bachelet, guiándose por los principios humanitarios en las relaciones internacionales, está dispuesta a recibir en su Embajada en Caracas a aquellos venezolanos que soliciten ayuda.
