En su primera aparición pública en las últimas dos semanas, Kim Jong-un pasó revista a los mandos del Ejército norcoreano y discutió un plan para lanzar cuatro misiles cerca de la isla de Guam, territorio incorporado a EEUU, informa Reuters, que cita a la agencia norcoreana KCNA.
"[Kim Jong-un] Dijo que si los 'yankis' persisten en sus acciones extremadamente peligrosas en la península coreana y en sus alrededores, poniendo a prueba el autocontrol de la RPDC, esta última tomará una decisión importante, tal y como ya había declarado", dice el informe de KCNA.
Para reducir las tensiones y "evitar el enfrentamiento militar, EEUU (….) debe cesar las provocaciones y dejarnos en paz".
Si EEUU no sigue este consejo, entonces "llegará el momento histórico insigne en el que los artilleros de los misiles Hwasong les agarren por la garganta".
A los militares el líder norcoreano les recomendó estar siempre listos para un lanzamiento, para "lanzarse a la batalla en cualquier momento por orden del Partido".
El comandante de las Fuerzas Estratégicas de Corea del Norte, general Kim Rak-gyom, desveló la semana pasada el plan de un ataque preventivo contra EEUU que sería presentado a mediados de agosto al dirigente norcoreano, Kim Jong-un.
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Por su parte, el presidente de EEUU, Donald Trump, afirmó que Washington respondería con "fuego y furia" a Pyongyang, recordó que su primera orden ejecutiva fue la de modernizar el arsenal nuclear de EEUU, "más poderoso ahora que nunca", y advirtió que las opciones militares ya están preparadas.
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La semana pasada, varios militares de alto rango revelaron al canal de televisión NBC News que el Pentágono confeccionó un plan de ataque preventivo a las bases de misiles en Corea del Norte cuya pieza clave sería el uso de bombarderos estratégicos B-1B Lancer emplazados en la base aérea Andersen, en Guam.
Corea del Norte realizó desde enero 11 pruebas de proyectiles balísticos, incluyendo el lanzamiento de dos supuestos misiles intercontinentales capaces de alcanzar el territorio de EEUU.
En 2016, Pyongyang llevó a cabo más de 20 ensayos de misiles balísticos, además de la cuarta y la quinta pruebas nucleares, pese a las prohibiciones del Consejo de Seguridad de la ONU.
