Tiene la piel de color canela y lleva el nombre de la especia en su apellido. "La gente piensa que es mi nombre artístico y tengo que mostrar mi documento. Me llamo Érika Canela de verdad", contó en entrevista exclusiva con Sputnik la Miss BumBum 2016. Sin embargo, la brasileña adoptó Canella con doble ‘l' artísticamente.
"Estoy feliz porque hice mi reinado como Miss BumBum, algo que superó mis expectativas y ahora es hora de pasar la corona adelante. Antes de ganar el concurso yo ya decía que sería mi despedida como modelo", remarcó.
La morena se considera un "retrato de Brasil" debido a una imagen del país en el exterior vinculada al carnaval. "Me miran y me dicen Brasil", sostuvo. Pese a que ganó el certamen de belleza por una parte del cuerpo bastante específica, la joven considera que no es el trasero lo que tiene de más lindo, sino la sonrisa y los ojos. "Tengo un ojo de cada color, a la gente le parece increíble", resaltó Canella.
Así fue que se volvió más exigente de lo que ya solía ser. "Mi madre siempre dice que quien mucho escoge termina siendo escogida", contó sin preocuparse. Una buena conversación es esencial para lograr una oportunidad con Canella. Sin embargo, la modelo no esconde su preferencia física.
"A mí me gustan también los negros, son los primeros que yo observo en una multitud. Asimismo, un blanco con una buena charla tiene chances. Yo soy quisquillosa, me gustan las personas inteligentes. Además, los negros prefieren las rubias", aseguró con una sonrisa de quien igualmente se divierte.
"Sufrí todo tipo de prejuicios por ser negra. Desde siempre. En Brasil, un negro con un auto es traficante o jugador de fútbol. Hasta en Miss BumBum escuché comentarios de que ni siquiera a mí me gustaba ser negra porque teñía mi pelo de rubio. Brasil es muy racista", aseveró.
Juguetona, enseguida recupera la sonrisa: "¡Hasta los negros que me gustan prefieren una blanquita rubia!". En cuanto a los hombres que sí la quieren, la modelo dijo estar acostumbrada a las "propuestas indecentes". "Las mujeres sufrimos con eso todo el tiempo", disparó, mientras reconoció que tuvo que aprender a ser más "educada" para manejar el tema. "Es que yo soy muy brava", alertó la musa.
De tan brava, rechazó a una invitación del futbolista portugués Cristiano Ronaldo. "Me contactó primero por Instagram cuando yo estaba en Portugal. Intercambiamos teléfonos, marcamos una hora y mandó un chofer a buscarme", relató. Sin embargo, la modelo contó que se atrasó y que, cuando estaba en camino, el crack la llamó.
"Me dijo que solo tendría 15 minutos para verme y yo me enojé. Le pedí al conductor que me llevara de vuelta a mi hotel. Después él me pidió disculpas", afirmó la brasileña y aseguró que no llegaron a encontrarse. "Después me enteré que él tiene novia, pero yo no sabía, él no comparte ninguna foto con ella en su Instagram", observó.
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Ante la repercusión negativa, la musa terminó borrando el dibujo de su piel. "Está haciendo las cosas mal, pero tiene carisma. Yo me decepcioné con él, sin embargo retiré el tatuaje porque hasta amenazas recibí, además de muchos insultos", recordó Canella.
Asimismo, la brasileña manifestó que le saturan los mensajes agresivos que cada tanto aparecen en sus redes sociales, sobre todo en Instagram, por lo que periódicamente hace su cuenta privada y después la abre de vuelta al público. Por otro lado, la Miss BumBum se sorprendió al saber que tiene tantos fans en Rusia, "ese país helado".
"A mí me gusta el calor y estar vestida con ropa corta. Años atrás mi hermana se ganó una beca para estudiar allá y yo la iba a acompañar, pero desistí por el frío. Si logro ir al Mundial, aunque sea verano, seguramente estaré bien abrigada", anticipó.
Si logra ir a la Copa del Mundo 2018 en Rusia, quizás se topa con otra Miss BumBum, la emblemática Suzy Cortez, su antecesora en el concurso. "Nunca pudimos hacer un ensayo fotográfico juntas por un tema de agenda. Es una tierna la Suzy", opinó. Sus fans estarán ansiosos por ese encuentro.