"La decisión tiene como objetivo proteger los intereses de los clientes, accionistas y empleados de la entidad, garantizando la permanencia de la entidad en la zona euro bajo la supervisión del Banco Central Europeo (BCE)", informó CaixaBank a través de un comunicado.
Además, CaixaBank destaca que este movimiento permitirá "preservar la integridad de los depósitos de sus clientes".
El Consejo de Administración de CaixaBank adoptó esta decisión después de que el Gobierno central aprobara este viernes un decreto que facilita los trámites a las empresas que deseen abandonar Cataluña.
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Las nuevas medidas adoptadas por el Gobierno permiten a los Consejos de Administración de las empresas decidir el traslado de su domicilio social a otros puntos de la geografía española sin tener que consultar con la junta de accionistas.
"A la vista de la decisión del Consejo de Ministros (…) el Consejo de Administración se reunirá tan pronto se publique en el Boletín Oficial del Estado la modificación de la Ley de Sociedades de Capital para adoptar definitivamente los acuerdos oportunos", anunció Caixabank.
Según la entidad, que cuenta banco cuenta con 15,8 millones de clientes en el mercado ibérico y más de 37.000 empleados, el traslado del domicilio social no comportará el movimiento de ninguno de sus trabajadores.