Entra rápidamente en el gimnasio, salta el torniquete de seguridad de la entrada ante los gritos de la espantada recepcionista, y con la misma rapidez, varios segundos más tarde, sale escopetado del mismo perseguido por varios estudiantes de jiu jitsu vestidos con sus kimonos, informa el portal G1.
El incidente quedó registrado por las cámaras de vigilancia y se denunció a la policía. El hombre logró escapar, no fue arrestado, pero durante la persecución perdió una de sus sandalias que está en poder de la policía.