Se trata de una zona industrial, una central eléctrica, una planta de procesamiento de gas, dos yacimientos petroleros y una base militar y otras instalaciones.
"Establecido el control sobre una instalación de Northern Gas Company (NGC), una comisaría policial, la central eléctrica de Kirkuk, una estación de filtración cerca de la instalación de gas", dice la nota al señalar que las unidades continúan avanzando.
Además, los militares arrebataron un suburbio de Kirkuk, una aldea cercana y dos puestos fronterizos.
La cadena Sky News Arabia informó más tarde citando el Ministerio de Petróleo que la extracción del crudo se realiza con normalidad y que los militares prometen evitar enfrentamientos cerca de las instalaciones petroleras.
El portavoz de la coalición internacional antiterrorista, Ryan Dillon, a su vez declaró que los aliados siguen de cerca la situación en Kirkuk y llaman a las partes a que eviten la escalada de tensiones.
El 15 de octubre el primer ministro y supremo comandante de Irak, Haider al Abadi, ordenó que los militares establezcan control sobre las bases militares y las instalaciones gubernamentales en la provincia de Kirkuk.
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Los kurdos se hicieron con el control de Kirkuk, una zona que alberga grandes yacimientos de petróleo, tras expulsar a los terroristas de Daesh (autodenominado Estado Islámico, prohibido en Rusia y otros países).
Las autoridades de Irak calificaron la consulta popular de ilegítima y subrayaron que no negociarán con el Gobierno autonómico kurdo ni reconocerán los resultados de la votación.
Tras el referéndum independentista kurdo, el Parlamento iraquí autorizó al primer ministro Al Abadi a enviar tropas a Kirkuk.
