"El problema humanitario (en Siria) es utilizado descaradamente con fines políticos, para acumular la presión unilateral sobre las autoridades sirias y Rusia que las apoya en la lucha contra el terrorismo", informó.
"En varios medios de comunicación y redes sociales occidentales (…) se está desarrollando otra campaña de información sobre la presunta hambruna en el suburbio damasceno de Guta Oriental", señaló.
Previamente una serie de medios publicaron informes en los se acusa a las autoridades sirias de causar intencionadamente hambre a 400.000 residentes de la zona.
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Las agencias humanitarias constatan el deterioro de la situación alimentaria pero no confirman la hambruna masiva.
Las zonas de distensión en Siria fueron creadas tras intensas gestiones diplomáticas de Rusia, Turquía e Irán para superar la crisis en Siria.
