Los restos del gigante fueron descubiertos por Marina Shitova, empleada de la reserva, mientras hacía su recorrido habitual por las costas de la isla de Bering, en el noroeste del océano Pacífico, y vio que varias costillas sobresalían de una ladera. Al llegar las condiciones climáticas adecuadas, Shitova y sus compañeros organizaron una expedición y lograron extraer cuidadosamente el esqueleto del animal.
La vaca marina de Steller era una especie gigante del grupo de los sirenios —pariente extinto de los manatíes y de los dugongos—. Recibió su nombre en honor a Georg Wilhelm Steller, naturalista que la describió por primera vez en 1741 mientras integraba la expedición rusa de Vitus Bering. En aquel entonces, el animal ya estaba a punto de extinguirse debido a la caza y su última aparición documentada data de 1768. Desde entonces, la existencia de esta especie no ha podido ser probada de forma fiable.
La vaca marina de Steller alcanzaba los 8 metros de largo y pesaba hasta 5 toneladas de peso, superando en tamaño a todos los mamíferos acuáticos, a excepción de los cetáceos. Llevaba un modo de vida poco activo, rara vez se sumergía y por lo general se mantenía cerca de las costas, lo que aceleró su exterminación.
Komandorski es la mayor reserva de la biosfera acuática de Rusia, con una superficie que iguala el territorio de países como Bélgica. Se ubica principalmente alrededor de las islas del Comandante (Komandorski), en el noroeste del océano Pacífico, a 175 kilómetros del continente asiático. En 2002, Komandorski entró en la Red Mundial de Reservas de la Biosfera, creada por el programa de la Unesco 'El Hombre y la Biosfera'.