"El líder supremo de Irán es el nuevo Hitler de Oriente Próximo", comunicó Saud en una entrevista al periódico estadounidense The New York Times.
"No queremos que el nuevo Hitler de Irán repita en Oriente Próximo lo que pasó en Europa", comentó.
El Ministerio de Exteriores saudí ya había llamado a Irán en otra ocasión el "principal país del mundo que patrocina el terrorismo".
Arabía Saudí rompió relaciones diplomáticas con Irán en enero de 2016, después de que manifestantes atacaran sus legaciones diplomáticas en Teherán y Mashad como consecuencia de la ejecución del predicador chií Nimr Baqr Nimr en Riad.
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Bahréin, Sudán y Djibuti se solidarizaron con Arabia Saudí y acabaron también con las relaciones diplomáticas establecidas con el país persa.
