La histeria masiva siempre acompaña las evacuaciones durante los desastres naturales. Sin embargo, ni siquiera todas las catástrofes requieren una evacuación urgente. Además, para muchas de estas desgracias uno puede prepararse, según cuenta el medio The Week.
Renne afirma que aunque uno no tenga que escapar de la zona del desastre, hace falta estar preparado para enfrentarse con la catástrofe.
Así, antes de todo, hay que estar listo simplemente para quedarse en casa, tanto más que durante algunas de las catástrofes —como ataques químicos— se exhorta a no salir a la calle. Sin embargo, hay que atender a las alertas de los medios la información locales y las redes sociales que pueden anunciar la posible evacuación.
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Además, se recomienda tener los artículos más necesarios al alcance de la mano. Se trata de suficiente cantidad de agua y comida que no se estropee pronto, al menos para un plazo de tres días. Además de los alimentos, se necesitará linterna, baterías, un kit de primeros auxilios y un cargador solar de teléfono para el caso de apagón.
Para la evacuación hace falta conocer bien tu casa. Es decir, hay que saber cómo se corta el agua, el gas y la electricidad. Además, hay que estudiar la ubicación de salidas de emergencia del edificio.
Lo último que tiene que hacer una persona que sufra un desastre natural es mantener la calma. Cada guía de supervivencia empieza con este consejo sencillo: "no entres en pánico". En verdad, es el espíritu positivo el que garantiza la voluntad de sobrevivir.